Dietas personalizadas

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El éxito de un tratamiento dietético radica en hacer sentir al paciente que no está sometido a una dieta restrictiva y distinta a lo que normalmente él acostumbra a comer.
Por este motivo se trata de respetar lo máximo posible sus gustos y costumbres, aprendiendo él mismo a organizar sus menús y a manejar su dieta haciendo las equivalencias correspondientes para compensar los posibles excesos que haya podido cometer.
El objetivo es adquirir una pautas alimentarias que sean constantes para lograr así un estado de bienestar fisico y psicológico que perdure en el tiempo.
No se eliminará ningún tipo de alimentos.
El paciente aprenderá cómo se debe componer su dieta sin eliminar ninguno de ellos.
La prohibición sólo conlleva a un aumento de la ansiedad y una falta de control en el hecho de cuidarse.

Valoración antropométrica

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Es importante saber la composición corporal del paciente antes de elaborar una dieta.
El peso es un parámetro que se queda “cojo”, ya que más importante es conocer cuál es el porcentaje de grasa corporal, para evaluar si un paciente está en condiciones normales o bien debe someterse a una dieta de adelgazamiento, o por el contrario se le aconseja cambiar su dieta para mejorar su estado nutricional.
También se valora en el transcurso del tratamiento la ganancia o pérdida de masa muscular para evaluar si el plan dietético es el adecuado.
Valoración perímetro cintura: Es tan importante conocer la cantidad de grasa como su localización.

Control del apetito con métodos inocuos

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La premisa fundamental para controlar el apetito es respetar todas las comidas principales sin saltarse ninguna, con algún tentempié entre horas.
En ellas deben estar presentes todos los grupos de alimentos, sin olvidar los que nos van a aportar azúcares de asimilación lenta (cereales, legumbres, patatas…), que son los que van a darnos una sensación de saciedad por su riqueza en fibra y los que mejor van a regular los niveles de azúcar en sangre para que no nos dé la sensación de hambre.
Además el paciente sabrá qué picotear entre horas sin que esto suponga un desequilibrio en el control de su dieta según sus circunstancias de salud o enfermedad.
El paciente descubrirá que la práctica de ejercicio físico de una manera regular y constante ayuda en gran medida a controlar la ingesta.
Se abordará cualquier situación psicológica que conduzca a una falta de control dietético con ayuda a través de remedios naturales.

Aprender a elaborar dietas

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El aprendizaje en el manejo de equivalencias y elaboración de los menús dará al paciente la sensación de control y libertad a la hora de escoger, siendo este hecho fundamental para que éste se sienta parte activa de tratamiento.
Para ello se cuenta en la consulta de múltiples envases existentes en el mercado de alimentos de consumo cotidiano para aprender a leer el etiquetado de los mismos y saber qué se compra y cómo se deben de consumir.
Dichos envases proceden de los mismos pacientes que los traen para pedir información sobre los mismos, formando parte activa de la cosulta.

Recetas de cocina saludables

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Para no caer en la monotonía de una dieta repetitiva se dispone al paciente de recetas cocinadas de una manera saludable, aptas para todos y sencillas en su elaboración.
El paciente aprenderá que para cuidarse no tiene que renunciar al placer de comer.
Los mismos pacientes donan sus recetas de cocina, para el beneficio de los demás.
Por otra parte la doctora cuenta con la experiencia de haber asesorado nutricionalmente a cocineros de la talla de Pedro Subijana.
En estos momentos colabora con el programa de Karlos Arguiñano.

Control de mantenimiento

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Una vez al mes el paciente deberá pasar por consulta para evaluar su trayectoria y valorar posibles cambios en su tratamiento.
El adquirir una pautas alimentarías sanas no se consigue en la primera fase del tratamiento, en la cual lo más importante es aprender cómo uno se debe cuidar.
Un paciente cambia de manera lenta y progresiva en el transcurso del mantenimiento.
En dicho mantenimiento habrá fases de crisis, en las cuales un apoyo y seguimiento por parte de un profesional hará que estas crisis sean cortas y de ellas el paciente salga fortalecido.